Hoy de noviembre de 2011, un día lluvioso, un día cualquiera, como los demás. Pero para mi no lo es... estoy con mi segundo café de la mañana, sentada frente al ordenador, pensando... madre mía cuanto hacia que no escribía en el blog, cuanto tiempo no me sentaba a ser Macarena, esa Macarena bruja... pues por lo que veo muchisimo tiempo. Y es que mi vida esta cambiando a pasos agigantados. La rueda no para de girar y girar y cada vez gira mas rápido. Dentro de poco el camino que estaba caminando dejare de hacerlo, pues toca a su fin, las sensaciones se arremolinan en mi, ganas de terminar y repasar las lecciones aprendidas, tristeza pues se termina algo con mucho cariño y esfuerzo. Confusión por que se me vienen muchas preguntas a la cabeza, dudas miedos... pero también es normal, verte sola después de caminar junto a alguien es terrorífico. Pero eso es algo que pasa siempre los que seguimos estos caminos. Los hacemos acompañados y solos, nos entran miedos, dudas, seremos validos, no lo seremos, y si, y si y si, y los y sis se nos amontonan en la cabeza, hasta que llega el momento de estar solos ante lo que sabemos y hemos aprendido, y los y sis desaparecen para dejar paso a lo aprendido. Nos aparece la valentía y la seguridad en nosotros mismos.y ahora me encuentro yo en esa situación, viendo como el camino por el que ando ahora, esta a punto de terminar, las dudas me vienen, los y sis me persiguen... pero en un rinconcito escondido de mi ser, sabe que podre hacerlo.
Tengo que tomarme mas tiempo para ser Macarena la bruja, y no Macarena la trabajadora, la madre, la ama de casa, la esposa.... y ser yo misma, aun que sean momentos pequeños como estos, mi café, mi manta por las piernas, mirando por la ventana como llueve, tengo que hacerlos.
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